SERVICIOS SOCIALES PARA TODOS Y TODAS. NO A LOS RECORTES

25 septiembre 2011

LOS PELOS COMO ESCARPIAS, NO DIGO MÁS.


En estos tiempos de grandes producciones, presupuestos infinitos y actores que van de estrellas, lo sean o no, quiero reivindicar un peliculón que te cagas, de esos que remueven conciencias, de las pelis que te dejan pensando. Y tiene sus efectos especiales y todo. Es una peli que podría servir a los colectivos ecologistas para remover conciencias, pero dejarte tocado de verdad en plan me vuelvo vegano a la de ya. Ríete tu de las tordas esas en pelotas delante de la plaza de toros con las banderillas “clavadas” en la espalda y todo lleno de tomate frito. Que lo que me da a mi es más morbo que otra cosa…

Es una peli para niños y mayores, para amantes del cine, de la vida y de las cosas bonitas, es una oda a la superación, al valor, a la amistad, a la superación de barreras de razas…

Joder no puedo más, lo suelto ya. El otro día vi “Babe el cerdito valiente”. Que grande, desde “Rebelión en la granja” no había visto nada igual. Ese gorrino marcado desde su más tierna infancia, con ese reconcome desde pequeñito por saber cual es ese lugar maravilloso al que llevan a los cerdos adultos y del que nunca vuelven. Cuanta emoción, y que duro se hace cuando se plantea, ya crecido, que a donde llevaron a su madre fue al temible matadero. ¡Campos de soledad mustios collados!

Esas alianzas y amistades leales entre los diferentes animales de la granja, ese afán de superación para romper barreras y esa obra de exaltación del esfuerzo como medio para conseguir lo que uno se propone. Vuelvo a decirlo, es muy grande. Que digo grande…Épico. Lo guardaré en mi archivo particular de peliculones al lado de la escena final del “Último Mohicano”, o de “El club de los poetas muertos” con ese “oh capitán mi capitán”.

A ver quien tiene güevos de calzarse unas chuletas de cerdo sin que se le queden atravesados en el gaznate después de eso. Toma nota grinpis.

19 septiembre 2011

EMPIEZO LA SEMANA CON EL SHEN QUE TE CAGAS DE GUAY.



Ayer me limpie los chakras, el aura y el shen. Mi hermana me hizo una sesión de acupuntura, si a mi, al escéptico patológico, al gruñón con una propensión innata al cabreo. En realidad es que hubo una confabulación de hermanas contra servidor. La pequeña, más maja ella, resulta que está inquieta porque considera que un día me va a dar un flus al corazón o una úlcera al estómago porque me ve muy estresado. Y pobre, pues que se preocupa. Ya os contaré algún día cositas sobre ella, porque lo mismo se preocupa en plan tierno por su hermano, que persigue a truhanes a voz en grito cual juez Dreed. Brutal la evolución de mi hermanica en los últimos tiempos.

Pero bueno, que yo estaba hablando de mi aura, chakra y tal. En realidad la sesión de ayer era para equilibrar el shen, que si no recuerdo mal es algo como la psique. Porque luego está el shi que es la energía y eso no me lo quisieron estimular porque en mi caso creo que hay que caparla un poquito. El caso es que mi querida hermana, convertida en mi curandera mandarina particular me ensartó diecisiete agujas como está mandado. En la frente, en la cabeza, en las muñecas, en el pecho, piernas y pies. ¡Ah! Y detrás de las orejas que a la cachonda se le olvidó decírmelo y cuando me enteré me hizo una ilusión loca.

Bueno total y resumiendo. Hay algunas agujas que duelen, no mucho, pero el shen te dice que le darías un pellizquito de esos de abuela, de los que joden al acupuntador para que no se olvide de que el cuerpo que taladra es el tuyo vaya. La sensación una vez estás ensartado es curiosa, oscila entre la molestia inicial por los pinchazos, a la pesadez del cuerpo y al olvido del mismo. O yo estoy muy tarado, que lo estoy, o esto de pincharse relaja un montón. Pero me refiero a pincharse sin sorpresas, que algunos ya me dirán “joé ya ves tronco en los ochenta se pinchaban y relajaban un güevo….unos viajes….”. No. Mal. Eso caca. Me refiero a la acupuntura.

Que me ha gustado la experiencia y para alguien nervioso como yo igual le viene bien, así que aprovechando que mi hermana sabe de esto creo que me voy a sacar un bono. Lo malo es que de vuelta a casa se me cruzó un cabrón con su coche y me dieron ganas de patearle el chakra, el aura, las meninges y a la madre que le parió y se me fue la relajación a tomar por saco. Supongo que aún me hacen falta algunas sesiones. Y con el terapeuta también.

03 septiembre 2011

VIOLENCIA ES DESTRUIR LO QUE ES DE TODOS Y PROMOVER PRIVILEGIOS. EN APOYO A LA ESCUELA PÚBLICA.


La cosa pública pinta mal. Pinta cada vez peor. Y me temo que el cataclismo que seguirá al 20-N va a ser de órdago. Los que vivimos en la Comunidad de Madrid ya sabemos como funciona esto. Aquí el partido popular no es que sea de derechas, que lo es. Lo grave del asunto es que es el máximo exponente del neoliberalismo más salvaje. C’est a dire, intervencionismo del gobierno mínimo y que sean los mercados los que fluyan y regulen el devenir de los ciudadanos.

Y claro, el liberalismo prima al más fuerte, al más rico, al poderoso y aquí en la Comunidad de Madrid los que no formamos parte de tan selecto club empezamos a tener las pelotas (y los ovarios) que no nos da de si ya el envoltorio. Y auguro que esto va a acabar muy mal, pero mal mal, ríete tu de las algaradas de Grecia. Eso va a ser como un juego de niños. Porque la indignación tiene un tope, las proclamas blanditas esas de jipis en plan “estas son mis armas” con las manitas levantadas tienen fecha fin. Y después de la violencia ejercida por los gobernantes, y en la Comunidad de Madrid es mucha violencia y mucho maltrato la que soportamos los que la habitamos, no queda sino responder de la misma manera, quizás violando nuestros propios principios, sabiendo que nos echarán en cara el haber traspasado la línea de eso que llaman “juego democrático”.

Pues la democracia no es un juego señores, y ahí radica su problema, que se lo toman a cachondeo, y entre tanto condenan a familias enteras a vivir en la penuria el resto de sus vidas, fragmentan el estado de derecho y minan los pilares del estado de bienestar. Truncan el futuro de los niños y jóvenes destrozando la educación pública, arriesgan la salud de los ciudadanos haciendo negocio con la sanidad, limitan el acceso a los servicios sociales básicos dejando de contemplarlos como un derecho para volver a la etapa de la beneficencia.

Y nosotros los ciudadanos, los que nacimos en democracia y los que lucharon contra la dictadura, nosotros los jóvenes y no tan jóvenes, padres, madres, parados y trabajadores, empleados públicos y de empresas privadas, estudiantes y abuelos, todos nosotros tenemos la obligación de mantener los logros que con tanta sangre, sudor y lágrimas se ha conseguido, esos derechos (que no privilegios) son lo que hacen que un país, estado, nación o como coño quieran llamarlo cada cual, sea un lugar maravilloso para vivir, es lo que hace que yo me sienta orgulloso de ser ciudadano, más allá de las paletadas de nacionalismos, banderas e himnos.

Ahora le toca a la Educación. La Comunidad de Madrid, su consejera de área Lucía Figar, y su Presidenta Esperanza Aguirre han asestado una estocada más a la maltrecha educación pública. No contentas con ceder terrenos de valor millonario a órdenes religiosas integristas y ultras para montar sus empresas educativas, no contentas con invertir más en cheques guardería para escuelas infantiles privadas, no contentas con minar el sistema British Council (ocurrencia de la propia Esperanza Aguirre siendo ministra de educación) en detrimento de un sistema bilingüe que genera muchas dudas, ahora han decidido no renovar a un número indeterminado de profesores interinos (la comunidad habla de 1700, los sindicatos de 3200), aumentando las horas de docencia de los profesores con plaza. No hay que ser un ilustrado para entender que menos profesores es igual a menor calidad de la educación, ya sea por el aumento del número de niños en las aulas, ya sea por la falta de profesores para cubrir los grupos. El último “barómetro” educativo situaba a la Comunidad de Madrid en las últimas posiciones en cuanto a la calidad de la enseñanza. Y por ese camino seguimos.

Lo que ha hecho la Comunidad de Madrid es un atentado contra el estado de bienestar, lanzando su ataque contra la educación (la sanidad anda agonizando en algún despacho) y por eso APOYO INCONDICIONALMENTE A LA COMUNIDAD EDUCATIVA, APOYO LAS HUELGAS Y TODAS LAS MOVILIZACIONES QUE EMPRENDAN, como ciudadano pero sobretodo como padre, porque quiero que mi hijo pueda el día de mañana labrarse un futuro, futuro que comienza hoy con la educación que reciba y de momento no hacen sino ponerle piedras en el camino.