SERVICIOS SOCIALES PARA TODOS Y TODAS. NO A LOS RECORTES

29 julio 2009

NINGÚN SIONISTA ES INOCENTE.




En documentos TV ayer nos presentaron a Mohamed. "El terrorista". Cuando Mohamed tenía 16 años preparó un ataque suicida en Israel que finalmente no pudo llevar a cabo porque el conductor del autobús que iba a saltar por los aires le descubrió antes de detonar la bomba. Y entonces aparece la familia sionista del conductor sionista comentando lo felices que son porque gracias a la torá y a la madre sionista que les parió a todos ahora pueden seguir junto a su padre que le quieren mucho y tal.

Pues fíjate que me alegro un muchísimo que puedan seguir junto a su padre al que quieren un güevo y tal, pero es que resulta que a escasos treinta kilómetros hay muchos seres humanos cuyos padres están presos, o muertos o niños que pasean al lado de las armas de los soldados de Sión.

Así que no me vengan a presentar al humilde conductor de autobús como un héroe nazional, porque esa familia sionista, como todos y cada uno de los sionistas, mayores y pequeños, mujeres y hombres, sionistas todos, son cómplices activos en el terrorismo del estado de Sión, estado artificial y violento, estado desarrollado ejecutor del mayor genocidio de los siglos XX y XXI, estado construido a golpe de talonario y a tiro de fúsil. Estado terrorista de Sión que se ha construido con el apoyo de las instituciones internacionales, de la Unión Europea, de los Estados Unidos y de la ONU, que se ha pasado por el forro las tibias resoluciones del Consejo de Seguridad de este último.

Así que esas familias sionistas no son inocentes. Ningún sionista con un pie en Palestina es inocente. Y mientras sigan ocupando un territorio que no les pertenece a cuenta de una deuda que Europa sintió que tenía con ellos, y basando su ilegal ocupación desde hace miles de años en supuestos mandatos divinos, se exponen a que hayan muchos Mohameds, lo cual no apruebo pero me cuesta condenar, y se exponen a que el pueblo legítimo de esas tierras ponga todo su empeño en expulsar al Estado de Sión, terrorista e ilegal. No os confundáis, no sois inocentes.

28 julio 2009

DILEMAS URINARIOS Y DEMÁS.


Soy un cactus. Bueno, por lo menos eso me aclaró la camarera de ayer cuando me descubrió mirando fijamente ambas puertas de acceso a los baños de su local. Obediente pasé por la puerta marcada con dicha cactácea.

Reconozco que para según que asuntos me vuelvo un pelín conservador. Y añoro esos servicios de los bares de toda la vida donde para acceder a los servicios se ven los carteles diferenciadores del sexo o del género o como se quiera llamar, en los que uno está representado por un galán con bastón y sombrero de copa (en su defecto un nene meando una parábola), y una por una mujer con su falda larga y parasol (en su defecto una nena sentada en un orinal). Y ya está, que ahora la mitad de las veces que voy al servicio a punto estoy de miccionarme encima. Que llego a la puerta y no se si soy volcán o montaña, cohete o luna, ángel o demonio, probeta o tetra brik. Joder…

Si es que a mi vejiga le va a dar algo a costa de la originalidad ajena. Y me encantan los sitios monísimos de la muerte, en serio, con sus velitas, sus cuadros pop art, sus camareros a veces perro flauta y a veces maniquí requetepeinado, sus panecillos de formas y sus platos llenos de aceto balsámico y crujientes de jamón. De verdad.

Pero por favor, cuando servidor va al baño además de querer verlo limpio, quiere poder acceder a él sin necesidad de ponerme en contacto con el oráculo de la modernidad. Gracias.

22 julio 2009

SOBRE REGALOS Y OTROS FAVORES.


Regalos. Sobornos, prebendas, chantaje. Parece que todo vale. Ahora resulta que nos quieren descubrir la cantidad ingente de regalos que reciben políticos de este país. Un regalo se puede hacer por tres motivos. Porque sea una ocasión especial, por puro placer o por recibir algo a cambio. Descartando lo primero y jactándome maliciosamente de la segunda opción, nos queda la tercera vía, y esa no es otra que agasajar al poderoso para conseguir un trato de favor. Lo cual nos lleva irremediablemente a la segunda posibilidad ya que debe ser sumamente placentero recibir las plusvalías del obsequio en cuestión.

El error viene por no ser conscientes de que el poder reside en el pueblo, y no en los políticos. Es necesario regular esta práctica, y se me antoja sencillo dicha regulación: Prohibir tajantemente los regalos a políticos y altos cargos. Se empieza por algo insignificante y se termina por carísimos relojes, coches y propiedades.

Y después viene el compromiso, el tráfico de influencias, más regalos, más concesiones, el reparto de un pastel que no les pertenece, trabajos realizados a bajísimo coste para obtener opulentos beneficios. Y para ello, materiales de mierda, condiciones laborales de mierda, trato de mierda y servicio prestado de mierda.

Pero parece que es lo normal. Y aún tienen los güevos de justificarlo. Y de los regalos al señor Juan Carlos y su prole ni hablamos. Te cagas.

10 julio 2009

CAMINANDO.


Vacío me bajo, me bajo y me voy.
Este mar ya no es el mío, lo mío será caminar, sin velas, ni cabos ni patrones. Ni timones.
Por tierra no hay rumbo a la mar.
Y cuanto me gusta navegar, buscar la recta que forma el horizonte y ponerla perpendicular con la pasión, la razón y el corazón.
Pero cuando el mar te escupe arrecia fuerte, pega.
Y la sal hace que ardan las heridas, y las manos trabajadas por los cabos perdidos.
Escorado vuelvo a tierra y me bajo.
Solo quiero caminar, sin rumbo, con mi grumete que ahora será escudero.
Y quiero ver gigantes y saber que son molinos, molinos de viento que soplan lo que no llenaba en el mar.
En lo que fue mi mar.

07 julio 2009

DUETO DESAFINADO


El cruel destino del dueto desafinado es desaparecer como consorte de algo que no era nada, una imagen difusa gastada con el paso del tiempo. Tal había sido el resplandor de los primeros días, que la misma luz que les dio cobijo terminó por amarillear su piel y sus corazones, dejando al descubierto vergüenzas, trampas y llagas que no cicatrizaban al estar expuestas a la tormenta.

Las retinas proyectaban hologramas de lo que podría ser, sin ser, y sus cuerpos se tocaban en un último y desesperado esfuerzo por asirse a una realidad que se escapaba, cumpliendo la peor de las sentencias, que no era sino saber que no podría ser lo que había sido, y pese a todo la dueto desafinado remaba, remaba hacia un eclipse del que apenas se vislumbraban los bordes. A ellos dirigían sus manos gastadas, unas manos que no alcanzaban, unas manos descoloridas y tristes, como cansadas de los acordes que ya no tocaban.

Y los labios pedían agua y recibían sed, el dueto desafinado ya no sabía besar y parecía que a lo lejos, lo que cabalgaba hacia el horizonte haciéndose diminuto hasta ser un punto indefinido, era su capacidad para luchar, para amar, para recordar. El dueto quiso cantar. Y es que sus labios secos no podían hacerlo, porque no ya no sabían besar.

Y cuando el dueto me miró, me vi solo. Solo yo, mirándome al espejo. Y sin embargó no me encontré.

02 julio 2009

AMIGOS Y PUNTO.


Hace tiempo que quería dedicar algo escrito a los amigos. A los amigos de verdad. Soy de los que diferencia entre los colegas y los amigos. Acceder a ser colega es relativamente fácil, no hay que ser muy exigente. Un colega es ese o esa con el que uno se va de cañas y se puede pegar unas charlas hasta que el sol te recuerda que has bebido demasiado y que ya vale de pegar a la hebra, repliegas velas y para casa. Un colega te da buen rollo, te anima, te entretiene y te da conversación. No es poco.

Un amigo es otra historia. Yo tengo pocos, pero son los mejores. Tengo alguno de toda la vida, de esos que saben de ti más que tú, de los que nunca debes esperar un comentario amable sino procede, de los que te ponen la vida delante de la cara y te pegan un ostiazo para que dejes de autocompadecerte y tires palante. Son esos también los que te hacen sentir único, los que sabes que siempre van a estar ahí, para darte el ostiazo o para darte aliento, para tirar de ti, o para no dejarte caer. Yo he pasado historias en mi vida que si no es por ellos me hundo, me ahogo, y creo que nunca he sabido agradecérselo suficiente.

Un amigo es el que te pide que te embarques y no le preguntas a donde, ni cuando zarpamos ni cuando volvemos, ni el porqué. Porque el porqué no es más que su envite y no importa a donde se va, se va y punto, y ahí te pillen confesado o sin confesar, con tus mejores galas o más desnudo que el rey del cuento (los reyes siempre son de cuento). Y hasta la victoria siempre. O no. O hasta la derrota, que más da, la gloria y la grandeza de los amigos es que se dejan arrollar si eso implica estar al lado de otro, de ese otro que has elegido que esté ahí, que has elegido estar con él ahí, y lo demás a tomar por saco. A un amigo no se le traiciona, ni se le deja en la estacada, ni se le entrega, con un amigo se corre de la mano hacia la derrota más certera, sabiendo que uno hace lo correcto, sabiendo que la vida que hemos elegido nos ha puesto ahí con él. O con ella. Y juntos nos caigan los palos.

Eso son para mi los amigos, y por si alguno aún no lo sabe, que lo saben, solo puedo decirles que gracias, gracias por ser y por estar, gracias por aguantarme, por escucharme, por apoyarme, por regañarme, por quererme, gracias en definitiva por acompañarme.



Os quiero.