SERVICIOS SOCIALES PARA TODOS Y TODAS. NO A LOS RECORTES

23 enero 2008

SUERTE ABUELO. SUERTE Y GRACIAS.


Parece que arrecia viento fuerte abuelo. Y el horizonte no acaba de despejarse. Dicen que al mal tiempo buena cara, y no hay más que verte para darse cuenta que el mástil de la vitalidad no se quiebra con una tempestad. Ahí estás, aferrado al timón esperando llegar a tu destino (llegarás abuelo, porque si donde te diriges de verdad existe,hay un sitio para ti seguro), tranquilo, pausado, transmitiendo la calma que te ha caracterizado. Y ahí estamos los demás, observando impotentes los bandazos que te procura este mar llamado vida, con hermosos atardeceres pero con peligros acechando a barlovento y sotavento. Nos queda inflar las velas con cariño, con apoyo, con presencia, porque si a un marinero nunca se le deja a su suerte menos al patrón. Y tu has sido el mejor de los patrones, no hay más que ver a tu tripulación, hijos y nietos que te admiran, y que se encargarán de transmitir a tus ya biznietos y a los que vengan los valores que tu nos has enseñado. Honradez, sencillez, cariño, respeto. Ese es el mayor legado que has construido, esa es la más rica de las herencias que podías transmitir. Porque dinero lo gana cualquiera, pero los valores hay que trabajarlos con mucho esfuerzo, hay que conservarlos con esmero y hay que transmitirlos con dedicación.

Y ahora que has puesto proa al horizonte no queremos dejar el puerto, queremos estar ahí, esperar, hasta que te alejes en la distancia, que no en el olvido, porque de recuerdos vivimos, en los recuerdos permanecemos, y tú estarás en los nuestros. Siempre.

Gracias abuelo. Te quiero.