Todo lo que tú quieras. Ayer se estrenó la nueva película de Achero Mañas. Creo que nunca he escrito sobre una peli pero hoy haré una excepción.
No se mucho de cine, pero si tengo que decir algo de la película es que me encantó. Me parece conmovedora y cimentada sobre un guión muy original. El argumento es extremo, pero por lo que he visto de las películas de Achero, sus argumentos suelen serlo. Y por eso me parece arriesgado, y por eso le doy más valor. En El Bola hablaba del maltrato infantil cuando aún no estaba “de moda” y él lo contó y lo bordó. En Noviembre homenajeó a los cómicos, a los actores de verdad y me fascinó. Y con Todo lo que tú quieras ha querido llevar al extremo una realidad que aún estando “de moda” se ve pero no se toca.
Achero se ha arriesgado y nos ha regalado una cinta tierna, un homenaje a las madres visto a través del amor de un padre hacia su hija. Un padre que entra en una espiral entre el juego y lo patológico llevado por el profundo amor hacia su hija Dafne, interpretada por una niña (Laura Fernández) que es para comérsela. Nunca tan pocas palabras dichas por una niña en una película pudieron llenar tanto. Juan Diego Botto nos mete en la piel del padre y nos hace sentir la angustia de tener que hacer lamentables equilibrios entre la pérdida de su mujer y la lucha por la felicidad de su hija de cuatro años.
En realidad si Achero hubiera querido arrasar en taquilla solo hubiera tenido que juntar a unas cuantas adolescentes que marcaran tetas, unos descerebrados de instituto cuya máxima preocupación fuera cuantos cubatas se iban a bajar y a cuantas tías se iban a trajinar y punto. Taquillazo.
Pero las películas de Achero son películas especiales y hasta cierto punto radicales y creo que como tal hay que verlas, sin ánimo de someterlas a una equidad real con el mundo en el que vivimos, pero si sentir las bofetadas que se reparten a fariseos, hipócritas y bienpensantes de esta sociedad nuestra que suele juzgar sin tener ni puta idea de lo que ocurre más allá de sus casas.
Así que le deseo lo mejor a esta película y a Achero, espero que su apuesta haya merecido la pena y que no vuelva a esperar siete años para grabar. Y a vosotros, los que leéis este blog os recomiendo que vayáis al cine a verla porque merece mucho la pena.
No se mucho de cine, pero si tengo que decir algo de la película es que me encantó. Me parece conmovedora y cimentada sobre un guión muy original. El argumento es extremo, pero por lo que he visto de las películas de Achero, sus argumentos suelen serlo. Y por eso me parece arriesgado, y por eso le doy más valor. En El Bola hablaba del maltrato infantil cuando aún no estaba “de moda” y él lo contó y lo bordó. En Noviembre homenajeó a los cómicos, a los actores de verdad y me fascinó. Y con Todo lo que tú quieras ha querido llevar al extremo una realidad que aún estando “de moda” se ve pero no se toca.
Achero se ha arriesgado y nos ha regalado una cinta tierna, un homenaje a las madres visto a través del amor de un padre hacia su hija. Un padre que entra en una espiral entre el juego y lo patológico llevado por el profundo amor hacia su hija Dafne, interpretada por una niña (Laura Fernández) que es para comérsela. Nunca tan pocas palabras dichas por una niña en una película pudieron llenar tanto. Juan Diego Botto nos mete en la piel del padre y nos hace sentir la angustia de tener que hacer lamentables equilibrios entre la pérdida de su mujer y la lucha por la felicidad de su hija de cuatro años.
En realidad si Achero hubiera querido arrasar en taquilla solo hubiera tenido que juntar a unas cuantas adolescentes que marcaran tetas, unos descerebrados de instituto cuya máxima preocupación fuera cuantos cubatas se iban a bajar y a cuantas tías se iban a trajinar y punto. Taquillazo.
Pero las películas de Achero son películas especiales y hasta cierto punto radicales y creo que como tal hay que verlas, sin ánimo de someterlas a una equidad real con el mundo en el que vivimos, pero si sentir las bofetadas que se reparten a fariseos, hipócritas y bienpensantes de esta sociedad nuestra que suele juzgar sin tener ni puta idea de lo que ocurre más allá de sus casas.
Así que le deseo lo mejor a esta película y a Achero, espero que su apuesta haya merecido la pena y que no vuelva a esperar siete años para grabar. Y a vosotros, los que leéis este blog os recomiendo que vayáis al cine a verla porque merece mucho la pena.
2 comentarios:
Jo, pues yo me moría de ganas de ver esta película y el viernes salí del cine un poco decepcionada.
No me disgustó, pero tampoco me llegó. No sé... creo que a la forma de contar la historia le falta algo. Justo ese algo que tienen "El Bola" y "Noviembre", que hace que llegues a los títulos de crédito con el corazón encogido.
Estoy de acuerdo contigo en que a la niña te la comerías. Y Juan Diego Botto se sale.
Y yo también espero que Achero Mañas no espere tanto para grabar la siguiente
Apuntado queda¡.
Siempre se agradecen las pequeñas joyitas entre tanto mojón visual con abdominales y tetas.
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