Los motoristas. Aclaro, los que conducen una moto por Madrid y sus alrededores. Esos encantadores compañeros de asfalto. Voy a aclarar lo primero que estoy a favor de que las carreteras no sean trampas mortales para ellos (véase tema quita miedos) y que las ciudades estén preparadas para no perecer en el trayecto, por corto que sea. Durante un breve periodo de tiempo conduje una escuter por la capital del reino, así que se a lo que me refiero.
Pero claro, me encanta tirar a dar, así que esta entrada no es para reclamar más seguridad para con los motoristas, sino para reclamarles a ellos más responsabilidad, más apego a sus vida y a mis nervios. Y de paso veo si sumo nuevos adeptos a la noble tarea de criticarme.
El caso es que puedo afirmar sin temor a equivocarme que la casi totalidad de los motoristas en esta nuestra ciudad conducen como el culo. Entendiendo como el culo colarse entre coches, pasar rozándote, adelantar por la derecha… y alguna vez aparco mi poso cristiano para desearle alguno un feliz trasplante de órganos a terceros. No puedes ir de víctima por la vida (demandas que por otro lado están más que justificadas) y después hacer el cabra y poner en riesgo tu vida de forma voluntariosa y frecuente.
Querido amigo motorista, tu moto tiene intermitentes igual que mi coche, úsalos, tu moto está sujeta a las mismas señales y límites de tráfico que mi coche, respétalos, y tu moto circula por los mismos espacios que mi coche, no pretendas crear una nueva dimensión espacio/entorno. Querido amigo motorista yo te respetaré siempre y cuando tú me respetes. Querido amigo motorista, prueba a conducir con responsabilidad, verás que puedes ser igual, sino más, feliz, y de paso no te espachurras y le evitas un disgusto a tus señores padres.
Digo.
Pero claro, me encanta tirar a dar, así que esta entrada no es para reclamar más seguridad para con los motoristas, sino para reclamarles a ellos más responsabilidad, más apego a sus vida y a mis nervios. Y de paso veo si sumo nuevos adeptos a la noble tarea de criticarme.
El caso es que puedo afirmar sin temor a equivocarme que la casi totalidad de los motoristas en esta nuestra ciudad conducen como el culo. Entendiendo como el culo colarse entre coches, pasar rozándote, adelantar por la derecha… y alguna vez aparco mi poso cristiano para desearle alguno un feliz trasplante de órganos a terceros. No puedes ir de víctima por la vida (demandas que por otro lado están más que justificadas) y después hacer el cabra y poner en riesgo tu vida de forma voluntariosa y frecuente.
Querido amigo motorista, tu moto tiene intermitentes igual que mi coche, úsalos, tu moto está sujeta a las mismas señales y límites de tráfico que mi coche, respétalos, y tu moto circula por los mismos espacios que mi coche, no pretendas crear una nueva dimensión espacio/entorno. Querido amigo motorista yo te respetaré siempre y cuando tú me respetes. Querido amigo motorista, prueba a conducir con responsabilidad, verás que puedes ser igual, sino más, feliz, y de paso no te espachurras y le evitas un disgusto a tus señores padres.
Digo.
5 comentarios:
Hola me alegra de saber de ti :), no sabia lo del foro ..ya me explicaras que ha pasado :)
Sobre tu entrada como dirian por ahi en la viña del señor hay de todo..
Besos.
Mar
totalmente de acuerdo turula es mas te digo una cosa, se merecen una entrada los conductores de taxi y autobuses
Uf, más grima me dan los ciclistas, esos sí que dan miedo...
SaLu2
Los motociclistas son gente buena, no delincuentes, que la moto no es una máquina infernal, sino una herramienta de transporte, trabajo, ahorro, turismo y diversión, que es tan segura como cualquier otro vehículo y que el problema es mas cultural que social o de orden público, no cierre la ventana al ver a un motociclista en un semáforo, o es que en su casa algún familiar que haya tenido o tenga moto es delincuente.
Estoy totalmente de acuerdo contigo, y agrego, no solo los motoristas españoles creen viajar igual que el bus de Harry Potter, los uruguayos también, y si hacemos una extrapolación, los del resto de los países tienen el mismo delirio.
A eso añadile -al menos en mi ciudad- no usar casco y no prender las luces. Realmente me da miedo lastimar a uno de esos señores y tener que pagarlo por bueno...
Te conocí por el concurso 20blogs, mucha suerte!!!
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